La banda costarricense Luminos arranca el año con su más reciente sencillo, “Nací para adorarte”, una canción creada para conectar espiritualmente con el oyente a través de su característico estilo musical.
Bajo la producción de Josías Onoto, el tema conserva la esencia de la banda, fusionando sonidos sintetizados con elementos acústicos, como las guitarras, para ofrecer una experiencia sonora envolvente.
Inspirada en la Biblia, “Nací para adorarte” está diseñada para ser interpretada en comunidad y transmitir un mensaje de adoración profunda. Mauricio Jiménez, integrante de Luminos y residente en Estados Unidos, explica que la inspiración surgió al imaginar el encuentro cara a cara con Jesús.
La letra sigue un recorrido narrativo que abarca desde la creación en el Génesis, pasando por la encarnación de Jesús y su obra redentora, hasta el anhelo de su regreso glorioso.
“La intención de esta canción es transportarnos a ese momento en el que la luz de Dios lo llenará todo y el sol nunca se pondrá, como un adelanto de la eternidad”, comenta Jiménez sobre el propósito del sencillo.
Este mensaje cobra vida en el puente de la canción “Nací para adorarte”:
«No puedo esperar al día que por fin te pueda ver,
entre lágrimas y risas sin poderme contener,
asombrado por tu gloria toda una eternidad,
para esto fui creado, para amarte y adorar».
La portada del sencillo refuerza el concepto celestial de la canción, ilustrando a un niño ascendiendo entre las nubes para encontrarse con Jesús, en una imagen inspirada en las palabras de Pablo a los tesalonicenses.

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